Los trabajos de mantenimiento del río El Dorado se iniciaron luego de haber sido retrasados por restricciones de circulación. A principios de febrero, nuestra estancia se vio afectada por lluvias torrenciales y, como nuestros vecinos, notamos que el agua fue inusualmente lenta para evacuar ya que el problema fue enfatizado por los muros de protección internos ilegales construidos por algunos agricultores en la parte superior del río que afectaron y cambiaron el curso del agua.
Por ello, con el apoyo de las autoridades locales, nuestro objetivo es reorientar el curso del río y limpiar el cauce (cavando más profundo y ensanchándolo) para permitir el paso del río y así evitar la entrada de agua al campo. Una vez alcanzada esta primera etapa, tendremos que drenar algunas parcelas donde el agua aún es estable.