Situación climática: ¡Adiós lluvia, hola ola de calor! Las temperaturas alcanzaron máximos sofocantes, superando los 40°c en muchas provincias. Muchas ciudades están sufriendo cortes de energía, creando situaciones caóticas (ver articulo de Buenos Aires Times, fechado 11/1/2022.). El clima cálido y seco y los bajos niveles de humedad también crean condiciones de incendio peligrosas. Bomberos ya están movilizados en 8 provincias para combatir grandes incendios.
No estamos exentos en la Región Corrientes ya que la situación ha sido catalogada como de extrema vigilancia por parte de las autoridades por incendios forestales o de matorrales. Ver artículo Telam, fechado 10/1/2022.
Explotación ganadera: Actualmente tenemos más de 6.500 cabezas en la finca. El estrés por calor puede afectar fuertemente a los animales en varios niveles (bienestar, producción, dieta, fertilidad, etc.). Para manejar este estrés, estamos ajustando el suministro de alimentos (ensilado, completado con maíz y pellets).
La superficie de pasto se ha reducido por la falta de agua y la steria, sembrada a principios de este año, apenas está brotando. Gracias a un estrecho control diario, el ganado está en general en buena forma hasta donde se puede ver, pero la producción de carne se verá afectada.
Este año hemos subarrendado a un contratista 215 ha donde se ha sembrado maíz y soja. Se nos pagará en especie ya que necesitamos maíz y soya para alimentar a nuestro ganado. El desarrollo de ambos cultivos se ve muy afectado por el estrés hídrico y las altas temperaturas, como puede ver.
La sequía, que actualmente está devastando los cultivos en toda América del Sur, ha provocado rápidos recortes en los pronósticos para la cosecha de soja en Argentina (el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja). La Bolsa de Comercio de Rosario ha recortado hasta ahora su estimación para la cosecha en un 11%. La sequía y el estrés hidrotermal han sido tan severos en los últimos 30 días que descartan la posibilidad de una temporada normal. La última sequía de la magnitud de la de esta temporada, en 2018, recortó al menos 1 punto porcentual el producto interno bruto argentino.