Realizamos grandes avances en la preparación de la tierra: se han preparado más de 1.000 ha (labranza, nivelación de la tierra, drenaje de la estancia y aplicación aérea de herbicida). Nuestro objetivo para el ciclo es sembrar en sociedad nuestra denominada superficie “base” de 1.600 ha y la producción se dedicará al 100% al cultivo de IRGA 424. Elegimos no extender nuestra superficie plantada debido a todas las intertrices del mercado (actividad comercial lenta, situación de Brasil y situación de pandemia).

Vamos a sembrar de nuevo por etapas este ciclo y tenemos como objetivo iniciar la siembra de la 1ª etapa el 25 de agosto (540 ha). De esta forma podremos tener una vendimia en etapa y reducir nuestros riesgos operativos (problemas climáticos y restricciones de riego) al tiempo que tendremos un mejor control de las hectareas ya que no van a estar todas en la misma etapa en el mismo momento.

Los fertilizantes fueron entregados por nuestro socio en la estancia y almacenados en nuestras instalaciones.

También estamos en la etapa final del mantenimiento de nuestras bombas de agua. Todo el proceso se ha retrasado por la pandemia (limitación de circulación de los prestadores de servicios, retrasos en la importación de repuestos, etc).

En 2 de las 4 bombas grandes en la estación de bombeo de agua del río (cada una con un caudal de 2600 litros por segundo), los cables de alimentación y control tuvieron que ser reemplazados debido al uso intensivo de nuestras bombas. Esos cables son clave pero sus importaciones se retrasaron. Esas bombas van dentro de una tubería con esos cables y luego deben instalarse con un cable de acero tensor para evitar la función de movimientos que cuando el agua crea turbulencias dentro de la tubería, los cables no tienen movimiento y no golpean las paredes de la tubería.

Para continuar, primero necesitamos retirar las bombas de sus tuberías. Es un proceso muy técnico porque si el agua llega a un lugar inferior, la bomba debe tratarse en condiciones de laboratorio (desmantelada y toda el agua del interior debe eliminarse; es probable que también sea necesario reemplazar los cojinetes). En la estación de bombeo, la bomba más pequeña (caudal de 1.600 litros por segundo) necesitaba un mantenimiento mucho más liviano, solo había que cambiar pequeñas piezas de repuesto. Los costos de mantenimiento pueden aumentar muy rápidamente si no presta atención.

Luego de haber registrado 10 días de lluvias intensas, reiniciamos con las actividades de preparación de la tierra. Después de un período de sequía, una pequeña lata de lluvia ayuda al trabajo en tierra pero no 10 días de lluvias continuas y densas. No obstante, con la maquinaria funcionando a plena potencia, nos pondremos al día muy rápidamente y hasta ahora hemos preparado más de 600 parcelas. La buena noticia es que esas lluvias ayudan de forma natural a nuestro embalse, ya que necesitamos la capacidad total de agua para el próximo período de riego del ciclo.

Según las últimas condiciones climáticas, deberíamos registrar lluvias más fuertes de lo que solía ser para la temporada y hasta mediados de agosto. Luego, la situación debería revertirse progresivamente a en septiembre (por debajo de lo normal, especialmente en la primavera). Las temperaturas seguirán la misma tendencia (por debajo del promedio hasta mediados de agosto, que los promedios). Los expertos predicen el fenómeno de La Niña para esta temporada en nuestra región. Por lo tanto, las lluvias actuales ayudan a reducir los costos de bombeo en todo el reservorio, aún serán útiles durante el período de riego de los campos, y los motores deben trabajar a plena capacidad durante los días que no llueve para estar listos para la etapa de siembra.

Estamos aprovechando el buen clima para rociar los campos con herbicida para controlar las malezas como se puede apreciar. Todo ese trabajo facilitará la penetración de las raíces y facilitará el riego y el drenaje. Mejora la distribución de malezas y residuos de cultivos en el campo como su control, y los incorpora al suelo.

Argentina, Brasil y Paraguay acordaron la apertura del vertedero de la planta de Itaipú (es la represa hidroeléctrica operativa más amplia del mundo) para solidarizarse con Paraguay y Argentina, que sufren una sequía y tienen inconvenientes para trasladar su cosecha de granos en el río Paraguay. 

Iniciamos el 22 de junio con el trabajo inicial de preparación de la tierra en las estancias.  En este ciclo, planeamos sembrar 1,530 ha con arroz en asociación con un grupo familiar local de semillas de desembarque y agroquímicos. Esperamos que tenga, al menos, similar nivel de resultados de producción. Para el ciclo pasado, obtuvimos 8t / ha como rendimiento con un índice de calidad promedio de 55. Produjimos más de 12,000 toneladas de arroz con cáscara y nuestros silos ahora están vacíos.

En términos de ventas, notamos que los precios del arroz han aumentado bien en mayo debido a las exportaciones a África y Pakistán. La situación fue impulsada por el temor a la titulización de alimentos de esos países debido a la pandemia de Covid-19. Por el contrario, Brasil casi desaparece en este ciclo en términos de importación de arroz desde Paraguay (generalmente el 90% de la producción de arroz paraguayo se exporta a Brasil) tampoco están exportando su propia producción. La pandemia de Covid-19 ha creado miedo y pánico en las cadenas de suministro de alimentos.

Continuamos contemplando las recomendaciones sanitarias y los protocolos estrictos para garantizar a nuestros empleados y contratistas el favorable entorno de trabajo seguro.

Por ahora, nuestra atención se centra en la preparación de la tierra, lo cual es importante para garantizar que el campo de arroz esté listo para la siembra. A su vez, se está creando un ambiente favorable para que las plantas de arroz germinen y crezcan.

Un campo, en optimas condiciones, mejora la estructura del suelo (mejor ventilación, permeabilidad y aflojamiento de la zona de la raíz) para facilitar la penetración de la raíz y facilitar el riego y el drenaje. Mejora la distribución de malezas y residuos de cultivos en el campo como su control, y los incorpora al suelo.

Todos nuestros contratistas se encuentran en la estancia e inician sus actividades después de llenar sus máquinas con gas.

El presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, expresó que la propagación del COVId-19 en Brasil amenaza el éxito de su país en contener el virus. Según Benítez, más de la mitad de los 563 casos de Paraguay eran personas que habían ingresado desde el vecino Brasil.

El país ha sufrido los últimos 2 meses un estricto encierro, y la mayoría de las personas con la enfermedad están en cuarentena en refugios vigilados. Mientras tanto, Brasil se ha convertido en el país más afectado en América del Sur. Los 2 países comparten una frontera de 400 km que generalmente está poco controlada. Pero el presidente Benítez decidió reforzar y militarizar «las partes más vulnerables» de la frontera.

Benítez es uno de varios líderes en la región que han expresado su preocupación por el brote de rápido desarrollo de Brasil. El presidente de Argentina, Alberto Fernández, dijo que el comercio entre los dos países es un riesgo, ya que los camioneros transportan productos hacia el sur desde Sao Paulo, una de las regiones más infectadas de Brasil.

Jair Bolsonaro ha dicho en reiteradas ocasiones que el riesgo que representa el coronavirus se ha exagerado, y se ha enfrentado en las últimas semanas con los gobernadores estatales que han impuesto bloqueos. En Brasil, 30 solicitudes para el despido de Bolsonaro ya fueron enviadas a la Cámara de Diputados.

Actualidad de la cosecha: la cosecha ya concluyó y las parcelas finales se cosecharon el 5 de abril. A su vez, se finalizó el proceso de secado de la producción; Es la operación más crítica después de cosechar un arroz. El secado disminuye el contenido de humedad del grano a un nivel seguro para el almacenamiento. Cuando se cosecha el arroz, contendrá hasta un 25% de humedad. El alto grado de humedad en el almacenamiento puede provocar la decoloración del grano, alentar el desarrollo de mohos y aumentar la probabilidad de ataque de plagas. Por lo tanto, un retraso en el secado reduce la calidad del grano y da como resultado pérdidas.

Según los resultados preliminares, se han producido alrededor de 12.200 toneladas secas de arroz con cáscara para esta campaña (lo que significa un rendimiento promedio seco de 8 t / ha) con un índice promedio de calidad superior al 56%. Estamos satisfechos con esos resultados preliminares dadas las condiciones de clima seco registradas (calurosas y secas con muy pocas lluvias irregulares pequeñas). Tuvimos que enfrentar varios períodos de restricción de bombeo de agua (ya sea total o parcial) desde el río impuesto por las autoridades. Algunos productores de arroz río abajo incluso tuvieron que abandonar parte de su producción debido a la sequedad y la falta de agua para regar sus campos.

Gracias a nuestra falta artificial de 480 ha y una gestión eficiente del agua, pudimos mitigar los efectos en la producción.

Situación comercial: Respecto a las crecientes preocupaciones sobre la propagación de COVID-19, las autoridades paraguayas  anunciaron la extensión de la actual orden de aislamiento  en viviendas hasta el 19 de abril. Todas las fronteras internacionales están cerradas hasta nuevo aviso. Solo se permitirá el envío de carga a través de las fronteras; sin embargo, las lluvias por debajo de lo normal en la cuenca de Paraná-Paraguay está obstaculizando el transporte de granos a través de las vías fluviales en Argentina, ya que el nivel del agua del río ha disminuido significativamente. El nivel del agua del río Paraná en Puerto Rosario es de apenas un metro y la última vez que estuvo por debajo de un metro en esta región fue el 10 de enero de 1989, según un informe de BCR (Bolsa de Comercio de Rosario). Los barcos que transportan granos deben reducir la carga de acuerdo con el nivel del agua (Articulo Diario La Nación, fecha 15/04/20).

Esto ocurre en un momento de la cosecha máxima de maíz y soja en Argentina. Además, los movimientos de camiones en el país ya enfrentan algunos problemas debido a la restricción impuesta para controlar la propagación de COVID-19. Esto, no solo afecta la cadena de entrega, sino que las fábricas también tuvieron que retrasar su compra de material y los productores tuvieron que detener sus entregas (ventas) y almacenaron su producción (silos, en casa o por terceros, bolsas de silos).

Actualidad de la cosecha: a pesar del desafiante entorno sanitario actual, se han cosechado, secado y almacenado más de 1.200 en nuestros silos. El rendimiento medio seco preliminar obtenido es mayor a 8 t / ha. Estamos en proceso de cosechar las últimas parcelas (alrededor de 400 ha), aun la cosecha todavía estaba demasiado húmeda para dar inicio (nivel de humedad del 28 al 30%, mientras que el objetivo del 26%). La cosecha debe concluir a fines de marzo – principios de abril.

Situación del mercado:

El real brasileño continuó depreciando para negociarse por encima de 5.1 frente al USD (ver gráfico USD a BRL a continuación). El real ha estado disminuyendo desde principios de año para negociarse ahora en su nivel más bajo histórico debido a las persistentes preocupaciones con respecto al crecimiento económico del país, el impacto de la pandemia de coronavirus y a pesar de los esfuerzos del banco central para apoyar la moneda. La situación brasileña tiene un impacto significativo en el mercado de arroz paraguayo, ya que el 90% de su producción se exporta a Brasil. A principios de marzo, vendimos 1,500 toneladas de arroz con cáscara a las fábricas locales (las entregas están en progreso) por USD 20 por tonelada más que el precio real.

El nivel del agua de todos los ríos, incluido el río Paraguay (corriente principal para el envío de granos), está en su nivel mínimo, lo que genera complicaciones logísticas.

El aislamiento social está perjudicando los servicios personalizados y el tráfico de camiones, por lo que la entrega de productos paraguayos a Brasil es más lenta que en una situación normal.

Actualmente, damos prevalencia a almacenar nuestro arroz con cáscara en nuestros silos esperando más estabilidad.

Situación climática: luego de haber enfrentado algunos períodos de restricciones de bombeo de agua (ya sea total o parcial) debido al nivel extremadamente bajo de agua en el río, la situación se revela con algunas precipitaciones densas registradas. Las lluvias torrenciales que causaron inundaciones y deslizamientos de tierra en el sureste de Brasil también elevaron los niveles de agua aguas arriba.

Estaríamos en condiciones de obtener la capacidad de agua óptima completa para regar las hectáreas restantes bajo riego si existe cualquier escasez natural de agua. Los campos también se beneficiaron del riego natural directo.

Al inicio del río, en la estación de bombeo, nos registramos ahora por encima de 3,7 m de nivel de agua.

Se podría acceder allí caminando hace 2 semanas, por lo que el nivel bajo había llegado al río como se puede apreciar a continuación.

Producción: Iniciamos la cosecha de nuestro primer bloque (Bloque G – 281 has). Los resultados preliminares de cosecha dados por esta área son muy alentadores ya que los rendimientos están por encima de 8 t / ha con un índice de calidad superior a 57.

Estamos trabajando para mejorar, bloque por bloque, rendimientos y calidad. Se precisa tiempo y precisión en el manejo de las hectáreas (trabajo de preparación del terreno, fertilización, limpieza e irrigación).

Actualmente contamos con 9 cosechadoras en funcionamiento, y nuestras secadoras están en pleno funcionamiento.

Vamos a cosechar el próximo bloque G que puede ver, en el lado opuesto del bloque E que acaba de ser cosechado y las instalaciones del silo.

Mercado: los productores de arroz en la región de Itapúa tienen una visión bastante pesimista para la cosecha 2019-20, debido a los precios planos del mercado (alrededor de $ 180 / t), el estancamiento en el precio del producto y las restricciones arancelarias que Brasil pretende imponer sobre Paraguay. exportación de arroz (un arancel aduanero del 3% mientras que otros cultivos estarían gravados con el 9%). Además, la moneda de Brasil también se encuentra en un nivel bajo frente al dólar estadounidense, lo que lleva a expectativas de precios de apertura muy bajos.

Productores paraguayos también están preocupados por el cambio en la administración en Argentina (las exportaciones se trasladan por el río Paraná a los puertos de Argentina). La administración anterior de la Sra. Kirchner impuso un impuesto a los cultivos cuando transitaron por Argentina y los agricultores están preocupados de que el impuesto se restablezca nuevamente bajo la nueva administración. Los impuestos a la exportación ya han aumentado por ellos todavía.

Sin valorar el costo de esas medidas proteccionistas, los rendimientos secos deben ser al menos superiores a 7,1 t / tiene que cubrir los costos directos de producción de arroz dadas las condiciones actuales del mercado. Según nuestros datos, hay aproximadamente 18,000 hectáreas de campos de arroz en la región de Itapúa, en las cuencas de los ríos Tebicuary y los arroyos Tacuary y Aguapey. Con el tiempo, solo quedarán unos pocos grandes productores si la situación continúa.

Situación climática: Continuamos experimentando las mismas condiciones climáticas que en los últimos meses (cálido y seco con muy pocas lluvias mínimas). Debido a las bajas lluvias irregulares, tuvimos que enfrentar períodos de restricciones adicionales de bombeo de agua (ya sea total o parcial) desde el río impuesto por las autoridades. Actualmente, el río está en un nivel extremadamente bajo como se puede ver.

No obstante, gracias a nuestro lago artificial de 480 ha, pudimos resolver el problema y seguir irrigando los últimos campos sembrados que se encuentran en la etapa final de riego. Algunos productores de arroz río abajo ya tuvieron que abandonar parte de su producción debido a la sequedad y la falta de agua para regar sus campos. Será otra campaña desafiante para los productores de arroz paraguayos.

Se pronostican algunas tormentas para la segunda y tercera semana de enero, donde las lluvias relacionadas ayudarán al riego de los campos, pero la lluvia pronosticada desafortunadamente no será suficiente para que el río se recupere. Los últimos 300 sembrados podrían verse afectados si la situación continúa, ya que el agua restante almacenada en el depósito no es suficiente para cubrir todas las necesidades (etapa de riego final para la mayor parte de la superficie sembrada en las etapas 1 a 3 y la última sembrada en superficie).

Producción: Estamos realizando pruebas de humedad para ver si podemos comenzar con la cosecha de los 1.250 sembrados iniciales. Actualmente tenemos un índice de humedad de 27/28 para las plantas y con 26, comenzaremos la cosecha. 8 cosechadoras están listas para comenzar el proceso tan pronto como alcancemos el nivel objetivo de humedad (se agregarán 2 cosechadoras en el período pico). También necesitaremos 3-4 días cuando la cosecha comenzará a estabilizar las máquinas (velocidad de rotación). Los silos y los secadores esperan la producción (se ha realizado un mantenimiento completo).